Melchor, Gaspar y Baltasar saludan a niños y mayores durante la cabalgata de Sariñena.
Melchor, Gaspar y Baltasar han desplegado su magia por la práctica totalidad de los 31 municipios de Los Monegros, despertando la ilusión de los más pequeños de la casa y generando un hermoso recuerdo entre sus familiares.
La mayor de las cabalgatas ha tenido lugar en Sariñena, con un total de ocho carrozas y casi una veintena de antorcheros. El recorrido ha incluido la participación de varios personajes de dibujos animados, artistas de calle y el lanzamiento de fuegos artificiales. A pesar del viento y el frío, Melchor, Gaspar y Baltasar han tenido una cálida acogida. Al finalizar el recorrido, y al igual que cada año, ha tenido lugar el esperado reparto de regalos, una de las grandes ventajas de vivir en el medio rural.
En Grañén, al igual que en otras muchas localidades, los niños y niñas han podido hablar, abrazar o sentarse en las rodillas de Melchor, Gaspar y Baltasar.
De hecho, el mismo acto se ha repetido en casi todas las poblaciones. «Las cabalgatas de las pequeñas localidades son las más bonitas; aquí los pueden ver de cerca y tocar, y eso es maravilloso», ha señalado una de las madres que junto a sus hijos disfrutaba de los actos organizados en Grañén. Allí la cabalgata ha supuesto además el inicio de sus fiestas pequeñas en honor de San Julián.
