La Comunidad General de Riegos del Alto Aragón ha lanzado una campaña dirigida a evitar el baño en canales, acequias y balsas, tras advertir la presencia de bañistas en algunas de sus infraestructuras. Los regantes relacionan esta práctica con la subida de las temperaturas y la decisión de varios ayuntamientos de no abrir sus piscinas municipales como medida de prevención ante el covid-19.
A través de un comunicado, recuerdan a la población que el baño está prohibido, ya que no son zonas de uso común y además, suponen un riesgo real para las personas. Asimismo, señalan que el agua que circula por los canales y acequias tiene como uso principal el consumo humano y por lo tanto, «cuando una persona se baña en estas infraestructuras está poniendo en riesgo la salud de las personas que consumen su agua».
Por todo ello, Riegos del Alto Aragón, en colaboración con la Confederación Hidrográfica del Ebro, manifiesta que va a mantener esta advertencia a lo largo de toda la campaña de verano, bajo el lema: “Esto no es una piscina”. La Comunidad General hace un llamamiento a la responsabilidad y la colaboración ciudadana.
El Ayuntamiento de Tardienta ya utilizó sus redes sociales esta misma semana para trasladar la preocupación de los regantes e insistir en el peligro de bañarse en estas infraestructuras. La localidad cuenta en sus inmediaciones con grandes infraestructuras dirigidas al riego y al transporte de agua de boca.
