La biblioteca de La Almolda reinventa su actividad

Uno de los objetivos es recuperar la tradición oral de la localidad.

Una de las participantes del desafí­o lector recoge su premio
Una de las participantes del desafí­o lector recoge su premio

La biblioteca de La Almolda se ha reinventado con el fin de dinamizar su comunidad. De esta manera, se han buscado nuevas formas de incentivar la lectura y la participación de los vecinos, se ha retomado un proyecto de recuperación de la memoria oral de la localidad y se han creado secciones nuevas en el blog, actualizado de manera periódica.

La labor de animación a la lectura se centra en estos momentos en un “desafío lector”, que se desarrolla desde enero y hasta el mes de marzo. Tres meses en los que los participantes tienen que leer seis libros, con diferentes características de género, autor o temática (adaptados según el rango de edad) para acercarles a títulos nuevos, provocar descubrimientos e invitarles a leer obras que, de otra manera, nunca leerían. Hasta la fecha, una quincena de socios han completado su reto, y otros ochenta están en proceso de conseguirlo, cifras que muestran la excelente acogida del público.

Tradición oral de La Almolda

Otra de las actividades desarrolladas en esta nueva etapa es un proyecto ya conocido por los vecinos, retomado: la recuperación de la tradición oral de la localidad. Un proyecto participativo, en el que todos los vecinos están invitados a compartir alguna documentación o información relativa a la historia y costumbres almoldanas, con el objetivo de recogerlas.

Además, y en colaboración con el colegio, la biblioteca tiene puesto en marcha un “libro viajero”, que va circulando por las casas de los alumnos, con el objetivo de que se apunten tradiciones almoldanas, pequeñas anécdotas familiares, antiguas canciones, cuentos o leyendas que serán recogidos y publicados, para ponerlos al alcance de todos.

Por otro lado, la biblioteca estrena sección en su blog, dedicada a personajes ilustres que sean originarios, desciendan o tengan alguna relación con La Almolda, dedicando su primera entrada al pintor José Luzán, maestro de Goya.