28-M: ¿Qué mueve a los que votan por primera vez?

Patricia, Carlos y Blanca tienen 18 años y por lo tanto, forman parte de la nueva generación de votantes.
Patricia, Blanca y Carlos, frente a uno de los últimos murales creados en el municipio de Grañén.

Patricia, Blanca y Carlos, frente a uno de los últimos murales creados en el municipio de Grañén.

 

Patricia Ferrer, Carlos Abadía y Blanca Gabarre están entre el millón y medio de jóvenes españoles que podrán ejercer por primera vez su derecho al voto en las próximas elecciones municipales y autonómicas. Los dos primeros viven en Grañén y la tercera, en Frula.

 

A pesar del alto porcentaje de abstención que se registra entre los jóvenes, los tres muestran cierto interés por la política y tienen previsto acudir a votar. A las puertas de cumplir 19 años, Carlos, que estudia Administración y Dirección de Empresas, confirma estar «ilusionado». «Se trata de un paso más hacia la vida adulta, que te permite sentirte más partícipe de la sociedad y en particular, del futuro de tu pueblo», señala el joven. «También es una nueva responsabilidad y por supuesto, una oportunidad de poder expresar tu opinión sobre la gestión y el día a día de tu pueblo», acuña Blanca, que, después de finalizar sus estudios de Bachillerato, se prepara estos días para enfrentarse a la EVAU. Su sueño es entrar en Enfermería.

 

Las respuestas de ambos denotan un mayor interés por la política municipal frente a la autonómica o nacional. De hecho, los dos insisten en la misma idea a la hora de ser cuestionados sobre su interés en política. «A nivel local, hay que interesarse y participar, ya que la política marca el futuro de nuestros pueblos», insiste Carlos. «No importa demasiado si sale uno u otro partido; lo importante es que los que salgan elegidos luchen por el bien común», añade el joven. «Aquí no importa el color del partido, lo importante son las personas que integran una lista y los objetivos o propuestas que tienen para el pueblo», añade Blanca.

 

A su lado, Patricia Ferrer cree que también es importante conocer qué proponen los diferentes partidos a nivel autonómico o nacional. «A mí, me gusta estar informada, conocer las diferentes posturas e ideas», señala la joven, que está a punto de realizar los exámenes de la Evau. Su objetivo es obtener la nota suficiente para entrar en Biotecnología.

 

A la hora de decidir su voto, los jóvenes señalan que se interesan por las políticas relacionadas con la educación y el bienestar social. También tienen claro lo que le piden a los candidatos. «Para mí, lo importante es lo que transmite, es decir, más allá de su carisma o capacidad de expresarse, necesito sentir que aquello que dice lo dice de verdad y que actúa con buena fe», señala Patricia.

 

Blanca Gabarre también tiene claros sus intereses. Al próximo gobierno, del que espera «capacidad de liderazgo y responsabilidad», le pediría más plazas de universidad, especialmente en las carreras de ciencias. Además, la joven, natural de Frula, tiene claro que le gustaría vivir en su pueblo y por ello, asegura que fijará su atención en las políticas de desarrollo del medio rural a la hora de decidir su voto.

 

A Carlos, según indica, le interesa conocer qué proponen los partidos a la hora de favorecer el acceso a la educación y al empleo. A nivel local, considera que se debe trabajar para «dinamizar más el pueblo, con la organización de un mayor número de actos culturales y de ocio». «Hay que trabajar para que la gente que vivimos aquí tengamos opciones de participar y disfrutar, a través de servicios de calidad y diversas actividades», señala. Para Blanca y Patricia, también es fundamental garantizar el acceso a la sanidad y la educación y además, generar empleo y fomentar el transporte público y la mejora de las carreteras, con el fin de que la gente pueda elegir dónde quiere vivir.

 

Los tres jóvenes reconocen que las redes sociales son su principal herramienta de información. Todos han leído además los programas electorales buzoneados por las candidaturas locales. Al próximo equipo de gobierno, los jóvenes les piden básicamente honestidad. «Tienen que actuar de buena fe y con la intención de buscar el bien común. Después, puede que consigan o no lo que se han propuesto, pero debe verse esa intención de luchar y trabajar por todos», resume Carlos, que, al igual que la mayoría de los jóvenes, reconoce que todavía no ha decidido el sentido de su voto.