Sena presenta dos nuevos gigantes en su comparsa

Se tratan de Zú y Sabina, personajes vinculados con la historia milenaria de la localidad.

Los nuevos gigantes, detrás, los que son sutituidos.

La Comparsa de Gigantes y Cabezudos de Sena acaba de sumar dos nuevos componentes, presentados este domingo bajo el padrinazgo de las comparsas de Fraga y Albalate de Cinca. Se trata de dos personajes vinculados con la rica historia del municipio, y que han sido bautizados como Zú y Sabina.

 

Zú, abreviatura de azud, es un agricultor árabe que homenajea a los habitantes del territorio que, entre los siglos VIII y X habitaron crearon el sistema de acequias, azudes y otras infraestructuras hídricas que desde entonces permiten el cultivo de la fértil huerta del Alcanadre. También es un homenaje a Miguel Ferrero, quien en 1948 rehabilitó el azud, en estado de ruina, por lo que le quedó el sobrenombre de Miguel “el del azud”. El gigante, de tez morena, lleva una azada al hombro y una ramita de albahaca en la boca.

 

Por su parte, Sabina rememora una de las personas inhumadas en las tumbas encontradas en la necrópolis visigoda del yacimiento de Las Peñetas de Manolo, donde predominaban los enterramientos de carácter familiar y colectivo. Pero en este caso, la tumba correspondía a una doncella, de unos 15 años, enterrada sola y con un buen ajuar, lo que denota su importancia. Su gigante es una adolescente rubia, con el pelo recogido y portando una cantimplora, un guiño a uno de los descubrimientos destacados durante las excavaciones en la necrópolis en la campaña de 2017.

 

Los nuevos integrantes de la comparsa fueron acompañados hasta la plaza.

 

La comparsa, que nació en el año 2010, necesitaba nuevos gigantes, más manejables que los actuales (que representan a doña Sancha y Pedro II) cuyo tamaño dificulta su manejo. Para su elaboración se han implicado numerosos vecinos de la localidad: el diseño ha corrido a cargo de Miguel Buil; el pintado, de la mano de la artista Josephine Monter; Alfredo Cerezuela, carpintero, ha ayudado con las estructuras, y varias mujeres más han confeccionado las vestimentas.

 

Los gigantes presentados se suman a los cabezudos Cucaracha, la gitanilla o el guardia civil. Además de las personas que portan los gigantes y sus ayudantes, la comparsa cuenta con un nutrido grupo de música, compuesto por numerosos jóvenes de la localidad y gran presencia de mujeres. En total, una treintena de personas conforman el conjunto, que este verano ha actuado en las fiestas de Poleñino y Huerto, y aún tiene por delante citas en las fiestas de Sariñena, Lalueza o Fraga.

 

Los gigantes de Albalate de Cinca y Fraga apadrinaban el bautizo.

 

Los vecinos de este municipio parecen tener una habilidad innata para crear, no hay muchas localidades que puedan presumir de un número igual de artistas: hay músicos, escultores, artesanos o pintores. Y todo ello se refleja en su día a día, ya que permite mantener vivas sus tradiciones, sumar atractivos turísticos o generar nuevas actividades, como el belén viviente, el belén monumental, la galería de arte, el grupo de música tradicional o la citada comparsa.