El Drogas y Tarque desatan una tormenta de guitarras sobre las aguas de Lanuza

El ex cantante de Barricada protagonizó un concierto que fue un repaso a su carrera y lo certifica como una figura sin par en el mundo del rock.
El Drogas se encuentra en plena de gira de 40 aniversario.

El Drogas se encuentra en plena de gira de 40 aniversario.

Tarque y El Drogas ofrecieron la noche más rockera de Pirineos Sur. Son de las figuras más reconocidas del género en este país y ambos han escrito algunos de los capítulos más importantes con sus respectivas bandas: M-Clan y Barricada. Pero si algo demostraron anoche es que viven del presente, que están en plena forma y que pocos artistas del momento son capaces de desatar una tormenta de guitarras como la que se cernió ayer en el pantano de Lanuza.

 

A Carlos Tarque siempre se le ha considerado como uno de los mejores vocalistas de su generación; el Rod Stewart del rock español. Mucho hay de eso, pero también es palpable su influencia de otros cantantes como Chris Robinson de The Black Crowes o Mick Jagger de The Rolling Stones. Y realmente, el planteamiento de su concierto discurrió por esos cauces: entre el hard rock de los 80 y el southern rock de los 70. Igualmente de bien se desenvuelve.

 

Acompañado de La Compañía del Rifle, una banda rock que suena como un cañón, fueron desgranando sus dos discos en solitario: “Bombas en son de paz”, “Heartbreaker”, “Días extraños”, “Mar de whisky”… Llamó la atención de todas las versiones que podría haber hecho es que recurriera a “Helter skelter” de The Beatles. Aunque por la energía de la original y ese espíritu desafiante, le sentó como un guante.

 

Dejó para el final tres trallazos que aún retumban bajo la Foratata: “Ahora y en la hora”, “He vuelto para haceros arder” y “Donde nace el rock and roll”; esta última como toda una oda a una música y a una actitud de vida, con guiño incluido a uno de los padres del invento: Led Zeppelin.

 

Y con esa actitud, con el rock and roll como forma de vida, salió El Drogas; cuál viejo pirata curtido en mil escenarios. Se encuentra en plena de gira de 40 aniversario, y el setlist se centró en los grandes éxitos que ha firmado con Barricada: canciones que con el pasar de los años se han convertido en la banda sonora de varias generaciones.

 

Con una formación clásica de bajo, batería y bajo se bastó para sonar como apisonadora. Secos, crudos, directos. Rock and roll. “La silla eléctrica” y “Esperando en billar” marcaron ese rumbo a seguir y de ahí el cuarteto no se apartó. Casi sin respiro hizo un repaso al repertorio más inspirado de Barricada, con un Drogas pletórico, en perfecto estado de voz y con la misma mala leche que siempre. Continúa escupiendo canciones a la cara, como puños: “Okupación”, “Víctima”, “La hora del carnaval”… El último tramo fue de infarto, con algunas de las canciones más importantes que se han escrito en castellano: “Balas blancas”, “No hay tregua”, “Esta es una noche de rock and roll”. Pero aún hubo tiempo para más sorpresas, cuando Tarque se unió a cantar con la banda “Frío”. “Blanco y negro”, esperadísima, sonó como un trueno en Lanuza cerrando una gran noche guitarras. Y tan a gusto.

 

Esta noche, un gran homenaje al flamenco

Los aires del flamenco regresan esta noche a Pirineos Sur, con los conciertos de Carmen Linares y Sara Baras. La primera está reconocida como una leyenda viva del flamenco, a la altura de Camarón, Paco de Lucía, Enrique Morente, Manolo Sanlúcar, José Mercé o Tomatito. Comenzó en solitario en 1980 junto a Juan y Pepe Habichuela, se reivindicó en los años noventa con excelentes discos y se coronó con uno de los mejores álbumes de la historia del flamenco: “Antología de la Mujer” (1996). Otra leyenda del género, la bailaora y coreógrafa Sara Baras, también actuará por primera vez en Lanuza. Su compañía acaba de cumplir 25 años y ha preparado un espectáculo que rinde homenaje al genio de la guitarra por excelencia: Paco de Lucía. “Vuela” está compuesto por 15 piezas únicas, donde cada una de ellas girará en torno a una palabra, creando así, con lenguaje flamenco, palabras en movimiento. Un recorrido fascinante dividido en cuatro actos, cada uno de ellos con una narrativa poderosa y diferente.

 

La noche del sábado 20 vendrá cargada de sonidos variados, tanto clásicos como modernos. Rawayana demostrará porque es una de las bandas de reggae más importantes del otro lado del charco. La banda venezolana, fundada en 2007, se hizo famosa tras lanzar su disco “Licencia para ser libre” y sus singles “Fuego azul” y algo distinto”. La fusión de ska, reggae, funk, soul, rock y ritmos latinos son los ingredientes de la música del cuarteto. Abrirá la noche Baiuca, un músico y productor gallego que fusiona la música electrónica con sonidos tradicionales de la cultura gallega. Su música ha sido descrita como “electrónica folclórica” o “música tradicional deconstruida”. Baiuca ha lanzado varios singles y dos álbumes, “Solpor” (2018) y “Embruxo” (2021), que han sido alabados por su habilidad para fusionar de manera efectiva los elementos electrónicos con los sonidos tradicionales de la gaita, la percusión y el canto gallego.

 

Por último, el domingo 21, Pirineos Sur volverá a llenarse de flow y buenas vibraciones, con La Plazuela e Iseo & Dodosound. La Plazuela, es un dúo que reivindica sus raíces flamencas, mezclandolas con  electrónica y nu funk. Tras dos avances muy bien recibidos, “El lao de la pena” y “Realejo Beach”, el año pasado publicaron su primer disco, “Roneo Funk Club”, con otros éxitos instantáneos como “Péiname Juana” “Ya primera helá”. Iseo & Dodosound son el gran referente nacional del dub y este mismo año acaban de publicar “En la tormenta”. Su cuarto trabajo es probablemente con el que más se han abierto a nuevos sonidos, con momentos cercanos al pop (como se puede escuchar en “Cuando salga el sol”). Y además de abrir su abanico, por primera vez se han animado a cantar en castellano.