Una exposición con 120 fotografías antiguas y actuales revela el esplendor original del monasterio de Sijena

Su autora es la guía de la casa natal de Miguel Servet e historiadora del arte, Alba Ferrer.

Alrededor de 120 fotografías antiguas, y su comparación actual con imágenes del momento presente, forman el grueso de la exposición ‘Testigos del tiempo, fragmentos de Sijena’, que se inaugura el próximo domingo, día 27, a las 12.00 horas, en la casa natal de Miguel Servet en Villanueva de Sijena.

 

La comisaria es la guía de este espacio y secretaria general de Instituto de Estudios Sijenenses Miguel Servet, Alba Ferrer, vecina de Ontiñena, que dedicó su trabajo fin de grado en Historia del Arte a recopilar e investigar sobre las fotografías antiguas del monasterio de Sijena. Y de allí surgió esta muestra, que tiene como objetivo mostrar el esplendor original del cenobio y, al mismo tiempo, «su evolución con el paso del tiempo, comparando imágenes antiguas desde 1911 con las realizadas en el momento actual», indica Ferrer. Las imágenes actuales son obra del vecino de Villanueva de Sijena, David Nuño, y evidencian el deterioro y las graves pérdidas sufridas por el cenobio, incendiado en el verano de 1936 y además, objeto de diferentes expolios.

 

Según explica la comisaria, el trabajo de investigación y documentación ha sido «exhaustivo», buceando en diferentes archivos históricos, entre ellos, la fototeca de la Diputación Provincial de Huesca, que ha constituido una de sus fuentes principales. También hay imágenes antiguas procedentes del Museo de Huesca, el Instituto de Estudios Sijenenses Miguel Servet y del Archivo Provincial de Zaragoza.

 

La exposición incluye además reproducciones de las magníficas acuarelas de Valentín Carderera, que han sido cedidas temporalmente por el Museo Lázaro Galdiano de Madrid y que muestran el antiguo esplendor de la sala capitular de Sijena, con su rico artesonado y sus pinturas murales. Los restos de las mismas siguen expuestos en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), a la espera de que el Tribunal Supremo confirme la sentencia que ordena su vuelta al monasterio monegrino.

 

Del conjunto, la comisaria asegura que los visitantes se mostrarán sorprendidos con algunas de las imágenes recopiladas, entre ellas, algunas inéditas o, al menos, muy poco conocidas como las correspondientes con la desaparecida capilla de La Trinidad o el palacio prioral. A ello, Ferrer une las imágenes «del antiguo coro, que se ve completo y que era precioso, y que descubrí en la propia biblioteca del Instituto de Estudios Sijenenses Miguel Servet». De hecho, su hallazgo fue lo que le decidió a dedicar su trabajo fin de grado al cenobio monegrino. «Ha sido un trabajo costoso, que nos ha permitido rescatar y documentar gran parte del patrimonio original de Sijena, dejando constancia de edificios, capillas o retablos desaparecidos, pero también triste, por todo lo perdido», indica Ferrer. «No obstante, es una obra gráfica muy potente, que nos llevará a imaginar el esplendor original del cenobio y por lo tanto, a valorar el gran tesoro que supuso y supone», añade.

 

Dentro de las 120 imágenes, y por su abundancia, destacan las dedicadas a la entrada principal de la iglesia, que constituye la imagen más conocida y difundida del monasterio de Sijena, que fue construido en 1183 por encargo de la reina doña Sancha, llegando a convertirse en Archivo y Panteón Real. «Aunque pueda parecer lo contrario, también es un elemento que ha cambiado con el paso del tiempo y de ello, nos hablan las 30 o 40 imágenes seleccionadas para la muestra», indica Ferrer. Por ejemplo, falta el habitáculo construido en su día sobre el tejado así como el sepulcro de Rodrigo de Lizana, situado en un lateral de la iglesia, que murió en la batalla de Muret con su rey, Pedro II, cuyos restos fueron enterrados en el interior de la iglesia de Sijena.

 

Antes de la propia inauguración de la exposición, a las 10.00 horas, aquellos que lo deseen podrán disfrutar de una visita guiada por el monasterio de Sijena, donde se explicará lo que se ve y lo que ya suelo muestran las fotografías. De momento, la muestra se quedará de forma permanente y por lo tanto, sin fecha de retirada en la casa natal de Miguel Servet, abierta cada fin de semana y los festivos. En concreto, los sábados y domingos de 11.30 a 14.30 horas y sábados por la tarde de 17.00 a 19.00 horas.

 

La muestra está organizada por el Ayuntamiento de Villanueva de Sijena y el Instituto de Estudios Sijenenses Miguel Servet.