
Imagen de las celebraciones de este fin de semana en el local de la Agrupación de Peñas.
Un 15 de mayo, pero de 1980, nacía la Agrupación de Peñas de Sariñena impulsada por un grupo de jóvenes que quería cambiar la fiesta de la capital monegrina, y lo consiguió. Para celebrar sus 45 años de vida, el pasado sábado sus socios estaban llamados a disfrutar de una jornada organizada para disfrutar de la convivencia y recuerdos compartidos con un vermú, comida (con más de 400 inscritos), tardeo y verbena nocturna, más un homenaje a todos los presidentes y juntas anteriores.
Por el escenario desfilaron desde la junta germen de la agrupación (en cuyo nombre habló Salvador Ariste) y todos los presidentes que le han seguido: Ricardo Ruiz, Salvador Trallero, Ricardo Sanclemente, Sergio Lana, Manuel Camón y Jorge Albás. Todos recordaron el trabajo de sus juntas, los esfuerzos y desvelos por sacar adelante la Agrupación o los cambios de locales hasta llegar al actual, una sala de fiesta que, apuntaron, «es la mejor de la provincia en estos momentos, y una de las mejores de Aragón» y que para poder conseguirlo «hace falta la implicación de todos y el entendimiento».
La Agrupación es, desde entonces, el alma de la fiesta de Sariñena y el motor de su transformación: impulsaron la pañoleta y fajín, así como la camiseta de cada año, tiñendo de blanco y azul las calles; hicieron de la cabalgata del primer día un acto participativo y masivo; crearon actos que ya son clave en la programación, como la ronda de peñas; y ha mantenido desde hace décadas las mejores orquestas en su cartel nocturno, con entrada siempre gratuita, la clave de su filosofía.
Hoy, con 1.300 socios de todas las edades, (un tercio de los vecinos de la localidad), la Agrupación sigue trabajando por hacer más grandes las fiestas. También es responsable de la celebración del carnaval, nochevieja o la verbena de Orbea.